17 nov 2010

Noticias Periodismo: Henrique Cymerman en la UMA

HOMENAJE A LA PAZ, LA CONVIVENCIA Y LA GASTRONOMÍA MEDITERRÁNEA EN CIENCIAS DE LA COMUNICACIÓN

La paz y la convivencia han sido las palabras más pronunciadas hoy en la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la UMA, que alberga durante dos días unas jornadas cuyo objetivo es aportar una visión conciliadora del conflicto entre israelíes y palestinos bajo la voz común de la gastronomía mediterránea.
Foto: Gabinete de Prensa
La rectora, Adelaida de la Calle, inauguró las jornadas ‘Málaga, luminar de culturas. Israelíes y Palestinos’, organizadas por el restaurador malagueño Samuel Perea, presidente a su vez de la Asociación Cocina por la Paz, y en la que se dieron cita otros cocineros, representantes a su vez de las zonas de conflicto, entre ellos Víctor Gloger, de Tel-Aviv; Ahma Nawaf, de Ramallah (Palestina) y el repostero Antonio García.

El acto de Ciencias de la Comunicación fue el marco en el que el corresponsal de La Vanguardia y Antena 3 en Oriente Medio, Henrique Cymerman, recibió un reconocimiento. Juan Antonio García Galindo, decano de la Facultad, presentó al homenajeado, del que dijo que “es una de las voces más autorizadas” para hablar del conflicto palestino-israelí.

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Algunas de las palabras que Henrique Cymerman dirigió a los estudiantes de Comunicación:

“ En Israel hay más corresponsales que en todo África. En coberturas como las de Darfur no hay imágenes porque no hay periodistas. Se cuentan por más de 1.500 los corresponsales extranjeros con sede en Israel, incluso China está descubriendo ahora el Oriente Próximo”.

Citando a Bengurión: “Tanta historia para tan poca geografía. Las personas no se encuentran en ese territorio, son dos líneas paralelas que no se cruzan, dos mundos enfrentados, no se conocen. Y la distancia entre ellos es de apenas quince minutos en coche."

"En Israel hay que hacer una doble corresponsalía, hay que tener contactos en los dos lados. La realidad es diferente, incluso la que ofrecen sus propios líderes. De cara a la galería muestran hostilidad entre sí y una vez que se apagan los focos se preguntan por la familia, los hijos. Hay que excavar porque se intenta vender una guerra para los medios comunicación. Ellos entienden que las guerras se ganan con los medios. El uso normalizado de los programas de televisión como propaganda: “Abeja Maya Integrista”.

"Sin educar para la paz no es posible el cambio. Hay que ser cautos, los ordenadores y las cámaras pueden ser armas benignas o no. La objetividad es imposible pero la honestidad es imprescindible, no escribir crónicas de antemano, romper mitos: Israel no es la antigua Esparta Armada ni Gaza es un arsenal de bombas."

"Israel es un gran desconocido para la opinión pública española, intento transmitir las luces y sombras pero no soy un cronista de conflictos sino un periodista que trabaja para quitar tópicos”.

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